Eres el oasis en el desierto que es mi vida. En tu pozo sosiego mi sed.
En tus arenas siempre acabo en polvo.
Confieso que cuento los segundos a tu lado.
Atado a tu hermosura me tienes y yo de aquí, no pido rescate.
Como buey bajó hechizó, tira de mi narigón cuando quieras.
Que siempre y cuando calcinado acabemos, el atrevimiento valdrá la pena.
No comments:
Post a Comment