Nunca supe que tanta sed tenía hasta que bebí de tu río. No me hubiera creído tan vicioso hasta que me diste a probar.
Un beso fue lo suficiente para embriagarme. Tu néctar me redujo a sonámbulo sin rumbo.
Noventa vidas pasare cantando tu nombre al viento y pidiéndote.
Caricias que cambian el sentido del mar, la sal por el almíbar. No las pude resistir.
Abandone cualquier huella del que fui. Hoy veo sentido en tus ojos y solo tu me conmueves........
No comments:
Post a Comment